3 ejemplos de elevator pitch para tu negocio

¿Sabes ese momento incómodo cuando alguien te pregunta: “¿y tú qué haces?” y tú te quedas tipo ehh… bueno… 

Sí, amiga, necesitas un elevator pitch.

Pero no uno aburrido y corporativo, uno que suene a ti, que emocione, y que te haga ver como la CEO poderosa que eres (aunque a veces sientas que solo estás sobreviviendo con café y Chat gpt).

Así que hoy te traigo 3 ejemplos de elevator pitch para tu negocio, según el mood en el que esté y lo que quieras transmitir.

Úsalos, adáptalos, o inspírate para crear el tuyo.

Primero lo primero: ¿Qué es un elevator pitch y por qué deberías tener uno?

Un elevator pitch es una presentación breve de tu negocio, de máximo 1 minuto. Su nombre viene de la idea de que puedas contar qué haces en lo que dura un viaje en elevador.

Pero no se trata de sonar como Shark Tank (aunque podrías intentarlo), se trata de que, si alguien quiere saber qué haces, puedas contarlo con claridad, seguridad y estilo en cada lugar que te imagines. 

Es de los momentos más esenciales de una venta, si no tienes uno, ¿Cómo esperas que las personas se sientan convencidas de porqué deberían de comprar tu producto/servicio? después de todo es la justificación de lo que haces. 

¿Dónde y cuándo usar tu elevator pitch?

No pienses que solo sirve en eventos formales, puedes aprovecharlo en:

• Tu bio de Instagram (texto que resume tu marca).
• Un reel de presentación de 15–30 s.
• Colaboraciones con influencers.
• Bazares y ferias locales.
• Cuando alguien te recomienda con una amiga.
• La sección “Sobre mí” de tu sitio web.

En cada uno de estos escenarios, un buen elevator pitch es tu mejor carta de presentación y para ello, nada como apoyarte en ejemplos de elevator pitch que te ayuden a inspirarte y encontrar tu propia voz.

Beneficios de un buen pitch

• Claridad: Evitas rodeos y comunicas tu propuesta en dos frases.
• Memorabilidad: Al ser breve y bien estructurado, la gente te recuerda.
• Oportunidades: Convierte interacciones casuales en oportunidades reales de negocio.

Dato curioso: Estudios de psicología social señalan que los primeros 30 segundos son clave para generar confianza y curiosidad (Fuente: Harvard Business Review).

Sin un pitch claro, tu historia se pierde entre cháchara y tu interlocutor nunca sabrá por qué debería interesarse en tus productos o servicios.

Checklist express: lo que sí o sí debe tener

Antes de entrar en nuestros ejemplos de elevator pitch, asegúrate de que tu discurso responda estas preguntas:

1. ¿Quién eres?
2. ¿Qué haces?
3. ¿Para quién lo haces?
4. ¿Qué problema resuelves?
5. ¿Por qué lo haces? (tu motivación)
6. ¿Qué te hace diferente?

Un elevator pitch que omita alguno de estos puntos corre el riesgo de quedarse cojo y no generar la conexión deseada.

Mini test: ¿Qué tipo de pitcher eres?

Antes de pasar a la siguiente fase, se introspectiva por un momento:

• Cuando hablas de tu negocio, ¿usas muchas emociones o muchos datos?
• ¿Te sientes más cómoda escribiendo o hablando?
• ¿Prefieres contar tu historia o ir directo al grano?

Resultados:

• Si eres vibra emocional, empieza con una historia personal.
• Si eres vibra CEO, ve por datos y resultados.
• Si eres vibra chill, opta por una frase casual pero clara.

3 ejemplos de elevator pitch que necesitas sí o sí

Ejemplo 1: El clásico con personalidad (ideal para eventos o redes)

Soy Cecilia Sanmer, fundadora de OREM. Creé una línea de agendas y plantillas digitales hechas para mujeres que buscan tomar el control de su tiempo, de sus metas y de su vida. Después de batallar con el caos durante años, quise ofrecer una herramienta real que combine productividad con bienestar emocional. En OREM no solo vendemos planners: ofrecemos estructura, acompañamiento y motivación para que cada mujer se sienta la líder de su historia.”

Este es uno de esos ejemplos de elevator pitch que funciona en eventos formales o conferencias online, pues mezcla datos (qué haces) con historia personal (por qué lo haces).

💡Tip: No tengas miedo de mostrar vulnerabilidad, lo que viviste puede ser justo lo que alguien más necesita escuchar para inspirarse o sentirse acompañada.

Ejemplo 2: El casual “estamos platicando” (perfecto para networking)

“Hola, soy Laura de Luz de Sol. Hago joyería minimalista y significativa, cada pieza está diseñada para recordarte algo bonito de ti misma. Todo es hecho a mano por mí en mi taller y cada joyita lleva una historia. La idea es que te pongas algo más que un accesorio: te pongas un recordatorio de tu fuerza interior.”

Un ejemplo breve y cálido, perfecto para networking informal, aquí la gente siente que habla con una amiga, y eso hace que tu marca, de inmediato, sea cercana.

💡Tip: A veces lo simple es lo más poderoso, no necesitas palabras grandes, necesitas conexión real, habla como si lo contaras a una amiga.

Ejemplo 3: El punchy de 15 segundos (ideal para reels o ferias)

Soy Lau y tengo una línea de skincare natural hecha en México para pieles sensibles. Sin fragancias ni ingredientes extraños. Mi misión es que vuelvas a amar tu piel, libre de irritaciones.”

Este mini-pitch es ideal para reels, ferias o presentaciones relámpago, un buen disparo de claridad: quién eres, qué haces y por qué debería importarme.

💡Tip : Tu pitch corto es tu gancho, piensa en él como tu bio de Instagram o la frase que alguien podría repetir cuando recomienda tu marca.

5 ejemplos de elevator pitch extra para inspirarte

Para que veas cómo la misma estructura se adapta a distintos negocios, aquí tienes cinco ejemplos de elevator pitch adicionales:

1. Tech Start-Up:
   
   “Soy Ana, CEO de CodeCare. Ofrecemos software de telemedicina especializado en salud mental para clínicas pequeñas. Con nuestra plataforma, los pacientes agendan y reciben terapia online sin brechas tecnológicas. Ya ayudamos a 200 clínicas a mejorar sus tiempos de respuesta en un 40 %.”
   
2. Coaching de Negocios:
   
   “Soy Diego, coach de emprendedores digitales. A través de sesiones de 1 a 1, ayudo a fundadores a pasar de facturar 10 000 a 100 000 MXN mensuales. Lo hago combinando estrategias de marketing y gestión del mindset, porque sin mentalidad no hay crecimiento sostenible.”
   
3. Productos Sustentables:
   
   “Hola, soy Mariana de EcoBox. Creamos kits de productos ecológicos para el hogar (jabón, cepillo de bambú, detergente sólido) que te permiten reducir tu huella de plástico sin renunciar a la comodidad. Con EcoBox, más de 500 familias han eliminado 2 toneladas de plástico en un año.”
   
4. Aplicación de Finanzas Personales:
   
   “Soy Luis, cofundador de AhorraYa. Nuestra app te enseña a gestionar tus gastos diarios con retos gamificados: ahorra hasta 20 % más al mes y recibe micro-recompensas al cumplir metas de ahorro. Más de 5 000 usuarios ya mejoraron su relación con el dinero.”
   
5. Agencia de Marketing de Contenido:
   
   “Soy Carla, fundadora de StoryBrand. Ayudamos a pymes a crecer su tráfico web con contenido SEO-friendly: blogs, guías y newsletters. En tres meses, nuestros clientes ven un aumento promedio de 60 % en visitas orgánicas.”

Estos ejemplos de elevator pitch te muestran cómo adaptar la misma fórmula a distintos sectores: datos + problema + solución + prueba social + llamado a la acción implícito.

Errores comunes que todas cometemos (y cómo evitarlos)

Tener un elevator pitch no es solo saber qué decir, sino cómo decirlo. A veces, sin darnos cuenta, usamos frases que le quitan valor a nuestro proyecto o nos hacen sonar menos seguras de lo que realmente somos. 

Aquí te dejamos los errores más comunes:

1. Minimizar tu proyecto

Frases como:

• “Bueno, es algo chiquito pero…”
• “Es una tiendita online nomás…”
• “Nada del otro mundo…”

Estas expresiones suenan humildes, pero en realidad le bajan el volumen a todo tu trabajo. Si tú no crees en tu marca, ¿por qué alguien más lo haría?

Mejor di:

• “Es un proyecto que estoy construyendo con mucho amor.”
• “Es mi marca y la he desarrollado desde cero.”
• “Llevamos [tiempo] creando productos con propósito.”

2. Justificarte por empezar

Frases como:

• “Apenas estoy empezando…”
• “No sé si esto cuenta como emprendimiento…”
• “Todavía no tengo muchos clientes pero…”

Cuando empiezas con una justificación muy literal, suenas como si necesitaras permiso para hablar de tu negocio, y no lo necesitas.

En lugar de eso, muestra lo que sí hay:

• “Estoy en una etapa inicial y muy emocionada por lo que viene.”
• “Ya dimos nuestros primeros pasos y seguimos creciendo.”
• “Tengo una visión clara y estoy trabajando en construirla.”

3. Usar tecnicismos o sonar demasiado formal

Frases como:

• “Mi marca ofrece soluciones integrales para el manejo del estrés mediante recursos organizacionales y productos wellness…”
• “Desarrollamos experiencias multisensoriales a través de insumos sostenibles…”

¿Quién entiende eso? A veces, en un intento de sonar profesional, dejamos de sonar humanas. Recuerda: claridad > sofisticación.

Opta por frases simples y cercanas:

• “Ayudamos a mujeres estresadas a encontrar momentos de paz con productos naturales.”
• “Creamos herramientas que te ayudan a organizarte y sentirte más en control de tu día.”

4. Decirlo como si estuvieras pidiendo disculpas

Tu tono importa, si lo dices bajito, rápido, o como si pidieras perdón por tener un negocio, eso se nota.

❌ “Espero no sonar exagerada, pero…”
✅ Habla con seguridad: “Estoy orgullosa de lo que hemos logrado…”

Habla con claridad, con orgullo y con la seguridad de que tu historia merece ser escuchada, si te ayuda, ensaya frente al espejo o con una amiga, tu pitch debe sonar como tú cuando estás segura de algo que amas.

¿Aún no sabes por dónde empezar?

¡Puedes llenar la siguiente plantilla y ver cual es la que resuena más con tu negocio!

Adapta tu pitch según el mood

• Formal: para mails, entrevistas o propuestas
• Chill: para ferias, pláticas, redes sociales
• Inspiracional: para reels, TikToks o eventos donde conectas emocionalmente

Practica, mide y ajusta

Un pitch no se memoriza palabra por palabra; se practica hasta sentirlo natural, sigue estos pasos:

1. Ensayo frente al espejo o grábate en notas de voz.
2. Mide tu duración: debe estar entre 15 y 60 s.
3. Pide feedback a tu tribu (amigas, colegas, mentoras).
4. Ajusta palabras que no suenen a ti.
5. Renueva tu pitch cada vez que lances algo nuevo o pivotes tu negocio.

Recuerda: Cuanto más lo practiques, más fluirá y más seguro te sentirás.

Tu historia merece ser contada

Haz que tu elevator pitch se convierta en tu recordatorio diario, escríbelo en tu espejo, ponlo en un post-it en tu compu o grábalo en notas de voz repetirlo cada día no solo te dará seguridad, también te conectará con tu “por qué”.

En el Diario Emprendedor encontrarás ejercicios como este, espacios para escribir tu pitch, trabajar tu visión, y seguir avanzando en tu negocio con claridad y propósito, es más que una libreta: es tu espacio seguro para crecer como emprendedora.

Conoce el Diario Emprendedor aquí.

No tienes que sonar perfecta, tienes que sonar real, conecta con lo que te mueve, lo que te emociona y lo que quieres lograr. Tu marca ya es especial, solo falta que aprendas a contarla.

¡Escríbelo, practícalo y cuéntalo sin miedo! ¡Tu historia puede inspirar a muchas otras chicas como tú!

Preguntas frecuentes sobre tu elevator pitch

1. Debo memorizar mi pitch al pie de la letra?
   No, lo ideal es que tengas clara la estructura y los puntos clave. Ensaya hasta interiorizar el mensaje, pero deja espacio para que suene fresco y espontáneo.
2. ¿Cuántos ejemplos de elevator pitch debo preparar?
   Entre 2 y 4 versiones:
   -Una corta (15 s) para reels y bazares.
   -Una media (30 s) para networking casual.
   -Una larga (60 s) para entrevistas o propuestas formales.
3. ¿Cómo adapto mi pitch si hablo con inversores vs. clientes?
   Usa el mismo núcleo (quién eres, qué haces, valor) y ajusta el lenguaje:
   –Clientes: enfatiza beneficios emocionales y cotidianos.
   –Inversionistas: añade números, escalabilidad y retorno de inversión.
4. ¿Cada cuánto debo actualizar mis ejemplos de elevator pitch?
   -Revísalos cada vez que tu negocio evolucione:
   -Después de lanzar un nuevo producto.
   -Tras recibir feedback importante.
   -Al cambiar tu público objetivo o modelo de negocio.

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Contenido elaborado por el equipo de Orem, especialistas en productividad y emprendimient